Tras dar a conocer cifras alarmantes sobre la mutilación genital que se registra en mujeres en el mundo por cuestiones culturales y religiosas, Ruth Leticia González Serratos, presidenta del Consejo de Calificación Profesional en Educación Sexual y Sexología, advirtió que aun cuando en nuestro país no se practica, cabría preguntarse qué tan frecuente se da en nuestra cultura la "mutilación psicológica" del placer sexual femenino, la cual finalmente no es una mutilación física, pero sí social y emocional.
Al dictar la conferencia "La sexualidad de las mujeres en su ciclo vital" ante más de mil catedráticas de la Universidad Autónoma del Estado de México, advirtió que su participación podría "perturbar" a los asistentes, al hablar de un tema tabú para muchos.
Entre risas nerviosas de algunos, de provocación de otros y las más, de aceptación de lo dicho, la doctora y especialista se adentró en el tema del placer femenino y afirmó que alrededor de la virginidad se crea una doble moral sexual, en la cual se busca mantener el control de la sexualidad femenina, en donde no se trata únicamente de la virginidad, sino de la pérdida del control sobre ella.
Aquí fue muy clara al sostener que la sociedad se adueña de la configuración, función, forma, apariencia, volumen, consistencia, edad y anatomía de los genitales femeninos.
En el marco de la ceremonia del "Día Institucional de la Mujer Académica Universitaria" que encabezó el rector de la UAEM, Eduardo Gasca Pliego, agregó que la conducta sexual femenina está basada en una diferencia social de poder, a pesar de los hechos biológicos que demuestran el potencial sexual de las mujeres.
Ante ello, señaló que las mujeres vivimos nuestra sexualidad con dos emociones: la ambivalencia de querer ser atractivas sin "ser locas", porque hay un juicio sobre la idoneidad moral de las mujeres. Y la otra, es que tenemos gran temor a los hombres.
González Serratos aseveró que dentro de una sociedad machista como en la que vivimos, las mujeres estamos sujetas a los hombres y se inventan varias cosas a su alrededor, como es la castidad, una doble moral sexual que mide para los varones toda una libertad sexual y para ellas toda una restricción y la restricción al mundo doméstico, del cual si salen, deben hacerlo bajo muchísimas normas.
Y mencionó una serie de acciones que se dan bajo este control del hombre sobre la mujer, donde sobresalen diversas conductas como exigirles pureza, la mutilación genital, la pornografía, maternidad forzada, control de su expresión sexual, usarlas como botín de guerra, el tráfico de las mismas, pasividad erótica, acosamiento, entre otras muchas.
De tal manera que la conducta sexual femenina, está basada en esta diferencia social de poder.
En este contexto, hizo un llamado a las presentes a evitar, permitir o reproducir ninguna forma de maltrato a las mujeres, empezando, dijo, por nosotras mismas. Cuidémonos, apapachémonos, querámonos, conozcámonos, amémonos muchísimo, porque nuestra mejor amiga siempre seremos nosotras mismas.
Antes, al dar su mensaje, Gasca Pliego admitió que en México siguen existiendo visos de exclusión, discriminación y explotación en contra de las mujeres, como la violencia física, sexual, laboral y psicológica.
Subrayó que después de muchos años, en los cuales la mujer había sido relegada, actualmente se comprende que "desempeña un papel fundamental en todos los aspectos de la vida social", imprescindible en la docencia, la investigación y el desarrollo tecnológico.
Acompañado por el secretario general de la Federación de Asociaciones Autónomas de Personal Académico, Adolfo Vela Olivares, Gasca reconoció la trayectoria de profesoras de tiempo completo, medio tiempo y de asignatura que han consagrado parte importante de su vida a la UAEM, por lo que hizo entrega de la presea "FAAPAUAEM 2010" a las académicas Alma Leticia Ferado García, María de Jesús Alvarez Tostado Uribe y Felicitas Vilchis Velázquez.(Y)
Al dictar la conferencia "La sexualidad de las mujeres en su ciclo vital" ante más de mil catedráticas de la Universidad Autónoma del Estado de México, advirtió que su participación podría "perturbar" a los asistentes, al hablar de un tema tabú para muchos.
Entre risas nerviosas de algunos, de provocación de otros y las más, de aceptación de lo dicho, la doctora y especialista se adentró en el tema del placer femenino y afirmó que alrededor de la virginidad se crea una doble moral sexual, en la cual se busca mantener el control de la sexualidad femenina, en donde no se trata únicamente de la virginidad, sino de la pérdida del control sobre ella.
Aquí fue muy clara al sostener que la sociedad se adueña de la configuración, función, forma, apariencia, volumen, consistencia, edad y anatomía de los genitales femeninos.
En el marco de la ceremonia del "Día Institucional de la Mujer Académica Universitaria" que encabezó el rector de la UAEM, Eduardo Gasca Pliego, agregó que la conducta sexual femenina está basada en una diferencia social de poder, a pesar de los hechos biológicos que demuestran el potencial sexual de las mujeres.
Ante ello, señaló que las mujeres vivimos nuestra sexualidad con dos emociones: la ambivalencia de querer ser atractivas sin "ser locas", porque hay un juicio sobre la idoneidad moral de las mujeres. Y la otra, es que tenemos gran temor a los hombres.
González Serratos aseveró que dentro de una sociedad machista como en la que vivimos, las mujeres estamos sujetas a los hombres y se inventan varias cosas a su alrededor, como es la castidad, una doble moral sexual que mide para los varones toda una libertad sexual y para ellas toda una restricción y la restricción al mundo doméstico, del cual si salen, deben hacerlo bajo muchísimas normas.
Y mencionó una serie de acciones que se dan bajo este control del hombre sobre la mujer, donde sobresalen diversas conductas como exigirles pureza, la mutilación genital, la pornografía, maternidad forzada, control de su expresión sexual, usarlas como botín de guerra, el tráfico de las mismas, pasividad erótica, acosamiento, entre otras muchas.
De tal manera que la conducta sexual femenina, está basada en esta diferencia social de poder.
En este contexto, hizo un llamado a las presentes a evitar, permitir o reproducir ninguna forma de maltrato a las mujeres, empezando, dijo, por nosotras mismas. Cuidémonos, apapachémonos, querámonos, conozcámonos, amémonos muchísimo, porque nuestra mejor amiga siempre seremos nosotras mismas.
Antes, al dar su mensaje, Gasca Pliego admitió que en México siguen existiendo visos de exclusión, discriminación y explotación en contra de las mujeres, como la violencia física, sexual, laboral y psicológica.
Subrayó que después de muchos años, en los cuales la mujer había sido relegada, actualmente se comprende que "desempeña un papel fundamental en todos los aspectos de la vida social", imprescindible en la docencia, la investigación y el desarrollo tecnológico.
Acompañado por el secretario general de la Federación de Asociaciones Autónomas de Personal Académico, Adolfo Vela Olivares, Gasca reconoció la trayectoria de profesoras de tiempo completo, medio tiempo y de asignatura que han consagrado parte importante de su vida a la UAEM, por lo que hizo entrega de la presea "FAAPAUAEM 2010" a las académicas Alma Leticia Ferado García, María de Jesús Alvarez Tostado Uribe y Felicitas Vilchis Velázquez.(Y)
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