El respeto es un valor fundamental en el que se asientan las relaciones humanas, ya que es una condición indispensable para la convivencia, la confianza y la dignidad de las personas.
Es necesario trabajar para fomentar el respeto y ser capaces de respetar el derecho de cada persona a tener su propio punto de vista, a tomar sus propias decisiones y a tener sus propios sentimientos.
¿Qué es el respeto?
Erich Fromm, en su obra El arte de amar, afirmó lo siguiente en relación al respeto:
“Respeto no significa temor y sumisa reverencia; denota, de acuerdo con la raíz de la palabra respicere(=mirar), la capacidad de ver a una persona tal cual es, tener conciencia de su individualidad única. Respetar significa preocuparse por que la otra persona crezca y se desarrolle tal cual es. De ese modo, el respeto implica la ausencia de explotación. Quiero que la persona amada crezca y se desarrolle por sí misma, en la forma que le es propia, y no para servirme. Si amo a la otra persona, me siento uno con ella, pero con ella tal cual es, no como yo necesito que sea, como un objeto para mi uso. Es obvio que el respeto sólo es posible si yo he alcanzado independencia; si puedo caminar sin muletas, sin tener que dominar ni explotar a nadie. El respeto sólo existe sobre la base de la libertad: l’amour est l’enfant de la liberté, dice una vieja canción francesa; el amor es hijo de la libertad, nunca de la dominación.”
De este fragmento se desprende uno de los aspectos más relevantes del respeto: respetar significa conocer a la otra persona y favorecer que sea tal y como es, no como nosotros deseamos que sea.
¿Cómo ser más respetuosos?
Cuando respetamos a los demás reconocemos su derecho a ser lo que son y a ser como son, sin juzgarlos y tratándolos con la dignidad que todas las personas se merecen.
Respetar implica valorar a las personas, sus virtudes y sus defectos, y reconocer sus derechos.
Ser respetuosos con las opiniones y decisiones de los demás no significa que compartamos la misma opinión o que estemos de acuerdo con las decisiones que toma.
Ser respetuosos significa que aceptamos que la otra persona tiene derecho a tener sus propios puntos de vista.
El respeto mutuo es indispensable para la convivencia. En ocasiones se tiende a exigirlo, pero se olvida darlo. Si se desea que otros nos respeten, debemos empezar por ser respetuosos, tanto con los demás como con uno mismo.
Como afirmó el Dalai Lama, para vivir mejor y ser más feliz, sigue las tres R: Respeto a ti mismo, Respeto para los demás y Responsabilidad sobre todas tus acciones.
¿Cómo ser más respetuosos? Es tan fácil como tratar a los demás como nos gustaría ser tratados.
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